El tiempo pasa demasiado deprisa cuando uno está en casa. No se puede controlar. Las sensaciones quedan grabadas en la mente, aunque su tacto se escurre entre mis dedos, como la arena.
"Mienrtas dibujaba en su mente el efecto del fluir de la arena, le ocurría a veces tener alucinaciones y pensaba que él mismo comenzaba a fluir". La mujer de la arena Kôbô Abe
3 comentarios:
... para salir de la kasa nezesitaba la kuerda ... pero a la maniana siguiente había desaparezido ... maremí! ...
saluz (fotazas)
El tiempo siempre pasa muy deprisa... y más cuando tienes un niño al lado... pero es bueno que se escurra como la arena. Y muy bonito ¿verdad?
Si mezclas la arena con agua se pueden hacer grabados aún más bonitos...
Me encanta la ultima foto...es la caña!
Un beso.
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